Tomar una tacita de té, café o mate es tradición de varias culturas, convirtiendo esta costumbre en un momento para compartir y disfrutar. Sin embargo, estos brebajes no solo cumplen con esta función, ya que muchas infusiones, sobre todo calientes, tienen varios beneficios para la salud de las personas.
Desde el comienzo de los tiempos, la humanidad ha buscado en la naturaleza remedios para curar y prevenir enfermedades. Una forma común y efectiva de aprovechar los beneficios de las plantas ha sido a través de las infusiones medicinales.
Pero ¿sabías que existe una gran variedad de otros recursos de la naturaleza que puedes usar como infusión? ¡Hoy exploraremos algunos de los tipos más populares y beneficiosos!
Infusiones de hierbas
Las infusiones de hierbas son quizás las más conocidas y utilizadas en todo el mundo. Su variedad es tan extensa como la flora misma. Algunas de las más populares incluyen:
● Manzanilla: conocida por sus propiedades calmantes. Puede ayudar a promover el sueño y a aliviar el estrés y la ansiedad.
● Menta: se utiliza tradicionalmente para aliviar trastornos estomacales como indigestión, flatulencias y cólicos.
● Té verde: tiene un alto contenido de antioxidantes que ayudan a reducir la inflamación, combatir el daño celular y reducir el riesgo de ciertas enfermedades.
● Romero: conocido por ayudar a aliviar la fatiga y a mejorar la memoria y la concentración.
● Ruda: se utiliza para aliviar una variedad de problemas de salud como problemas digestivos, espasmos intestinales, indigestión y flatulencias. También se utiliza para aliviar el dolor menstrual.
Infusiones de hongos adaptógenos
Los hongos adaptógenos han ganado recientemente mucha popularidad debido a sus propiedades únicas para equilibrar el cuerpo y la mente. Muchos de estos se pueden consumir en platillos deliciosos, como el shiitake, el maitake y el melena de león.
Sin embargo, hay otros que por su estructura, deben ser sí o sí preparados como infusión. Entre ellos están:
● Cola de pavo: también conocido como trametes versicolor, es un hongo adaptógeno reconocido por su potencial inmunológico y antioxidantes. Contiene compuestos llamados polisacáridos-K (PSK) y polisacáridos péptidos (PSP) que pueden ayudar a combatir ciertos tipos de cáncer. Algunas investigaciones indican que puede apoyar la salud del intestino y promover el equilibrio de la microbiota.
● Reishi o Ganoderma lucidum: se le conoce como el hongo de la inmortalidad por su capacidad para apoyar la longevidad y la salud en general. La infusión de reishi puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, combatir la fatiga y el estrés, y promover un estado de equilibrio mental y físico.
● Chaga: es altamente apreciado por su abundancia de antioxidantes y nutrientes que ayudan a apoyar el sistema inmunológico. Se ha demostrado que tiene propiedades antivirales, reduce la inflamación y puede mejorar la resistencia física. Además, se ha sugerido que la melanina del chaga puede tener un efecto protector en la piel contra los daños causados por la radiación UV.
De todas formas, estos son solo algunos ejemplos, ya que en general las infusiones de hongos adaptógenos promueven la salud del sistema inmunológico, mejoran la energía y el enfoque mental, e incluso ayudan a reducir el estrés.
¡Solo debes investigar bien qué quieres lograr a la hora de elegir el tuyo!
Infusiones de raíces
Las infusiones de raíces son otra opción popular que a menudo se pasan por alto. Estas infusiones se realizan utilizando raíces de plantas que tienen propiedades medicinales. Uno de los ejemplos más populares es el jengibre, que se utiliza para ayudar con la digestión y reducir las náuseas.
No obstante, tenemos otras alternativas como:
● Ginseng: se cree que tiene propiedades adaptogénicas, lo que significa que puede ayudar al cuerpo a adaptarse al estrés. También se ha demostrado que el ginseng mejora la función cerebral, aumenta la energía, puede reducir el azúcar en la sangre y tiene potencial para reforzar el sistema inmunológico.
● Cúrcuma: se la valora por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Además, la curcumina, el compuesto activo de la cúrcuma, ha demostrado tener potencial para mejorar la salud cerebral y proteger contra enfermedades del corazón.
● Diente de león: La raíz de diente de león ha sido utilizada durante siglos en la medicina tradicional para tratar diversas afecciones físicas, desde problemas digestivos hasta dolencias del hígado. Además, es una fuente rica en vitaminas y minerales.
Como puedes ver, las infusiones medicinales son una manera excelente y natural de mejorar tu salud. Ya sea que prefieras hierbas, hongos o raíces, ¡hay una infusión medicinal para cada gusto y necesidad!
Así que la próxima vez que busques un poco de alivio o bienestar, considera preparar una taza de una de estas maravillosas infusiones. Recuerda siempre buscar asesoramiento médico antes de comenzar cualquier nuevo tratamiento complementario para tu salud.
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