SUBPESCA por protestas en Chiloé: “El mayor riesgo de contagios es llamar a manifestarse en la calle provocando aglomeraciones “

El Subsecretario de Pesca y Acuicultura, Román Zelaya, afirmó, apoyado en verificaciones de autoridades sectoriales de Chiloé,  que las salmoneras y los productores de choritos han cumplido las exigencias sanitarias impuestas por la Seremi de Salud de Los Lagos y Sernapesca, en relación con las barreras sanitarias de la Isla.
Zelaya advirtió que el cordón sanitario anunciado para Chiloé, en el marco de la pandemia COVID-19, es necesario para garantizar la salud de la población y que debe ser cumplido estrictamente. Por lo mismo, acotó, las empresas acuícolas y de mitilicultura deben someterse a los máximos estándares de salubridad y seguridad.
“Personalmente solicité, tanto a la Seremi de Salud como a la Directora de Sernapesca, informes respecto de la actual situación sanitaria y de seguridad de la producción y transporte de los productos del mar. Ambas autoridades me confirmaron que, precisamente, la fiscalización en las barreras sanitarias ha sido exigente y que se ha ratificado el cumplimiento de los estándares y protocolos de la autoridad”, detalló.
Así, agregó Zelaya,  se logran propósitos esenciales:  evitar contagios, proteger la salud de los trabajadores del sector y garantizar el funcionamiento de la cadena productiva y de distribución de alimentos. En ese contexto, anotó que la autoridad y los organismos públicos competentes son los únicos facultados para fiscalizar el cumplimiento de las normas e instrucciones, durante la emergencia.
A la vez, el Subsecretario pidió a la ciudadanía que se mantenga en sus hogares y que cuide las cadenas de distribución de alimentos. “Lo verdaderamente riesgoso para efectos de contagio es salir a la calle o llamar a manifestarse, provocando aglomeraciones. El objeto del Gobierno es garantizar la salud de la población y de ahí la instalación del cordón sanitario”, explicó.
Asimismo, informó que dentro de las medidas coordinadas con las empresas están la desinfección y sanitización de plantas e, incluso, lugares públicos; la reducción de producción progresiva, a partir del 23 de marzo, para llegar a un 30 % menos en promedio; derivación a sus hogares de empleados que integren grupos de riesgo; disminución en el número de integrantes de los turnos;  y restricción o suspensión de traslado de personal en aquellas empresas que tienen operación en distintas regiones, entre otras.